Hoy en día, Google es el buscador de información más utilizado del mundo, con más de 3,7 millones de búsquedas por minuto según el último informe de Lori Lewis “This Is What Happens In An Internet Minute”.
Pero Internet no llegó con Google. Hubo una época a mediados de los 90 en la que Internet comenzó a crecer de manera rápida y desordenada. Aparecieron cientos de buscadores diferentes que se repartieron el mercado de búsquedas. AltaVista, Webcrawler o Yahoo fueron los antecesores.
A medida que los usuarios de Internet crecían y demandaban más información, los resultados que aparecían eran cada vez menos relevantes para esas búsquedas. La información estaba desordenada y muy diversificada, lo que frustraba a los usuarios.
Ante esta situación, Google desarrolló un método para ordenar, filtrar y clasificar todos estos datos para ofrecer al usuario la información que está buscando de una manera rápida y sencilla. Ese método fue su algoritmo. De este modo, Google se fue posicionando en Internet como el buscador por excelencia y se convirtió en el gigante que es hoy.
¿En qué consiste el algoritmo de Google?
El hecho de que Google se haya posicionado como el buscador más fiable en Internet, (lo que no quiere decir que sea el único) es gracias a su famoso algoritmo matemático. Este algoritmo trabaja cruzando millones de datos en una ecuación, con el objetivo de reducir al mínimo los posibles resultados ante una búsqueda.
Para clasificar los resultados ante una búsqueda, Google se basa en cientos de factores como pueden ser la tasa de rebote, las redirecciones, el contenido duplicado… Además, Google está constantemente actualizando sus factores. Perfeccionando su algoritmo y haciéndolo cada vez más complejo con el fin de que el contenido de los resultados ante una búsqueda, sea de utilidad para el usuario.
En 2014, Google hizo uno de los mayores cambios en su algoritmo y muchos sitios fueron penalizados y su posicionamiento bajó. Pero también ha hecho que muchas otras se hayan posicionado de forma orgánica, aumentando su tráfico. De este modo, las posibilidades de “engañar a Google” para posicionar una web son muy remotas, y ello obliga a las diferentes páginas a optimizar sus contenidos.
Cambios del algoritmo de Google que pueden afectar a tu web de viajes
Los constantes cambios en los algoritmos de Google hace que ningún especialista SEO sepa con certeza en qué se basa Google para posicionar una u otra web. Pero es importante estar al día sobre qué consisten estos cambios para podernos hacer una idea de la estrategia que debemos seguir si queremos posicionar nuestra web de viajes en las primeras páginas SERP (Search Engine Results Page).
Panda
Fue la primera gran modificación que Google hizo sobre su algoritmo. Buscaba combatir aquellas páginas que no tenían un contenido de calidad: con contenidos duplicados, faltas de ortografía, llenas de publicidad y en general, que no aportasen valor útil para el usuario. Este algoritmo se basa en aspectos como la tasa de rebote, el número de visitas a la web, su diseño, la frecuencia de publicado o el tiempo de permanencia.
De este modo, muchas páginas bajaron su posicionamiento, pero otras subieron a los primeros puestos de las SERP. Para posicionar tu web de viajes lo mejor posible, debes tener en cuenta aspectos como: la redacción y la extensión del texto, si está relacionado con el tema de tu web, si la información es realmente interesante para tu público, la organización de tu página o si está actualizada. Cuanto más amena hagas la lectura o la navegación por tu página de viajes, mejor será vista por Google; utiliza imágenes, vídeos, infografías y cualquier cosa que pueda resultar interesante para tu público.
Penguin
Fue la actualización que Google sacó un año después de Panda. En este caso, buscaba combatir los enlaces de mala calidad. Antes de esta modificación, muchas webs trabajaban con enlaces masivos, comprándolos sin seguir un orden o sacándolos de “granjas” de enlaces sin ningún valor. Lo que Google quería, era castigar la mala práctica del linkbuilding.
El objetivo final es crear una comunidad en la que los enlaces se consigan en base a una relación de valor para el usuario. Para que Penguin no penalice tu web de viajes, te recomendamos que los links que añadas en ella, o en tu blog, estén relacionados con tu temática y tengan un sentido con lo que estás contando. Añade enlaces a redes sociales para compartir contenido, y si decides pagar por un enlace a la hora de hacer linkbuilding, te recomendamos que antes te asegures de que las temáticas están relacionadas y que realmente puede interesar a los usuarios.
Colibrí Hummingbird
Ante el crecimiento de las búsquedas por voz, Google sacó en 2013 Colibrí. En este caso no es una actualización, sino un nuevo algoritmo único en buscadores que se dirige a analizar las consultas por voz. Al contrario que los anteriores, Colibrí no penaliza, sino que favorece el posicionamiento de las webs que están optimizadas para móviles.
Este nuevo algoritmo se basa en el contenido y el contexto de la pregunta. Ahora las palabras clave no son tan importantes. Google es capaz de comprender preguntas coloquiales que suelen hacer los usuarios de smartphone y responder de forma sencilla y ordenada. A este tipo de búsquedas conversacionales se las conoce como “búsquedas semánticas”.
Para conseguir un buen posicionamiento, es importante tener en cuenta que las búsquedas de los usuarios en móviles suelen contener palabras como dónde, qué y cómo. Por ello, debes añadir este tipo de palabras en tu contenido a la hora de posicionar tu web de viajes, para que coincida con la forma en la que los usuarios buscan la información.
Paloma
Sacada en 2014, la actualización Paloma está dirigida a posicionar los resultados de una búsqueda en base a tu geolocalización. Al igual que Colibrí, esta actualización no penaliza, pero favorece aquellos negocios que se encuentren más cerca del usuario que hace la búsqueda. Por tanto es una actualización que además favorecerá a Google Maps.
Por ejemplo si buscas un restaurante para comer, Google nos ofrecerá los resultados en base a su ubicación y distancia respecto a tí.